En lo personal, considero que a estas alturas resulta poco menos que ingenuo creer que la partidocracia, que ha tenido más espacio del que le correspondía para hablablablar y quemar tiempo valioso, ahora sí estaba dispuesta a debatir para sacar la mejor constitución posible.
Probablemente fue un error darle demasiado tiempo a las comisiones, a las que tal vez habría sido mejor atender en días u horarios específicos, y de ser posible, cuando en el pleno, al menos los asambloeístas alternos continuaban con el trabajo. A estas alturas es inútil llorar por la leche derramada, pero es una lección que el corcho cordero debería haber aprendido, para dedicarle el tiempo de debate a un verdadero debate, y poner en su puesto a los bochincheros que se han pasado de escándalo en escándalo en vez de aportar con hechos concretos a la nueva constitución.
Probablemente fue un error darle demasiado tiempo a las comisiones, a las que tal vez habría sido mejor atender en días u horarios específicos, y de ser posible, cuando en el pleno, al menos los asambloeístas alternos continuaban con el trabajo. A estas alturas es inútil llorar por la leche derramada, pero es una lección que el corcho cordero debería haber aprendido, para dedicarle el tiempo de debate a un verdadero debate, y poner en su puesto a los bochincheros que se han pasado de escándalo en escándalo en vez de aportar con hechos concretos a la nueva constitución.
Si Acosta quería marcar una diferencia con la asamblea acuartelada del 98, lo hizo, pero ahora que el tiempo apremia, tocaba dedicarse exclusivamente a trabajar. Recién está aprobada la cuarta parte del articulado, y hay bastante que ya está aprobado en primer debate en el pleno; y en primero o segundo debate en las mesas.
Por ese lado, es lamentable la manipulación de los medios, que hacen creer a la gente que falta hartísimo, cuando en realidad hay bastante articulado ya avanzado, aunque no se haya aprobado en segunda instancia por el pleno.
En todo caso, la presencia de Alberto en la reunión posterior, a la que asistieron Ricardo Patiño y más dirientes de País, es una clara muestra de que el Movimiento PAÍS sigue unido, y que cuando el estilo de uno de sus elementos puede afectar el trabajo, no hay problemas para que otro tome la posta.
Si la Asamblea Constituyente se hubiera tomado un par de meses extra para terminar la nueva constitución con el estilo de trabajo de alberto, habrían salido los llorones a decir que se volvía a desobedecer la voluntad popular. Ahorita se están quejando porque Correa pidió a alberto que terminen el trabajo en el tiempo previsto y reglamentado.
palo si bogas, palo si no bogas.
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