poema que me envió Guido Jalil
Faluya
Faluya
ha comenzado sobre
Faluya es el nombre
de los simulacros
del Juicio Final.
Un dios fingido
desde su olimpo blindado
escupe
chorros de fuego líquido
sobre los hijos de los hombres,
este falso dios,
desolla
vivos, todavía,
a los hijos de los hombres,
les lanza
cada vez que quiere,
según el humor del día
o de la noche,
bombas de racimo
que explotan pavor retumban
abren cráteres
en donde
se alzaban
las viviendas, las escuelas,
templos, hospitales.
El falso dios blindado
insaciable,
desconoce que está viva
la maldición del Pentateuco:
“Escucha ¡Oh! soberbio guerrero
acorazado,
el cielo que está sobre tu cabeza
será de bronce
y la tierra que está bajo tus pies
de hierro”.
Todavía,
no se amenaza
con huracanes, tempestades
y diluvio.
y uno que yo he publicado no-se-cuántas-veces
CABEZA HUECA
Mejor te escribo ahora
que no me importan hiroshima ni faluja
que me pierdo en tus ojos no me amargo
con chavales hambrientos o el ALCA o mtv
mejor me inspiro ahora
que eres vos mi musa
y solo a vos te quiero y te preciso
ahora que tu cuerpo vale más
que la deuda externa de todo el tercer mundo
ahora
que al ver tu boca
pienso en besos
no en protesta insultos hambre
Tiempo habrá después en el otoño
para ser parcial
tomar conciencia
y hacer de la poesía una trinchera
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