Yo quería ser bonito
Cambio Extremo Mix
El otro día hice un casting para participar en Cambio Extremo Mix (Canal 1). Pero apenas me vieron, me dijeron que yo era un caso perdido y que no desperdiciara mi tiempo. De nada me sirvieron los 50000 mensajes que envié para ser nominado. Me dijeron que fuera al Rincón de los Milagros (tc) para ver si allí se podía hacer algo, pero por la cara que tenían, llegué a la conclusión de que no debía abrigar mayores esperanzas.
Y es que los productores del programa decidieron que Cambio Extremo era un programa demasiado superficial, ya que se enfocaba únicamente en el aspecto físico, y no tomaba en cuenta otros aspectos como los valores, la personalidad, la religiosidad, etc.
Esta nueva temporada va a buscar un verdadero cambio de los concursantes, quienes además de tener un mejor aspecto, serán mejores personas en lo ético, espiritual, moral e intelectual.
Después de hacerme los respectivos tests de personalidad, optaron por sacarme a patadas del canal, puesto que si ya era absurdo tratar de cambiarme la fachada, resultaba francamente ridículo tratar de cambiar mi esencia.
(Esto lo iba a publicar el lunes, pero me dio pereza)
Réquiem por Lorena
Hace unos días un zorro trató de comerse a Lorena. En primera instancia, la libré de sus garras cuando el zorro ese le estaba mordiendo el cuello para llevársela a algún rincón mientras mi madre gritaba aterrada por la triste escena. Tuve que caerle a golpes para que saliera corriendo (al zorro, no a mi madre).
Como no puedo matar a ningún animal, lo fui a llamar al Gaby para que se encargue, pero este man le ha tenido miedo a los zorros, y fue a buscar al guardián, quien le cayó a garrotazos (al zorro, no al gaby). Después de que lo nokearon, gaby, muy asustado, se llevó al zorro medio muerto para echarlo al estero. La verdad es que daba pena ver la cara de asustado de ese pobre animal (el gaby, no el zorro)
Lorena estaba ciega, y daba pena verla caminar torpemente, gritando cada vez que tropezaba con algo. Estuvo un día sin comer, y mientras estábamos en Cuenca visitando a un tío, Lorena murió. A mí me tocó recibir la noticia y decírsela a mi hermana y mi mami, quien se puso a llorar.
Lorena llevaba un par de años con nosotros. Tenía mal carácter, había que ponerle música para que no se enojara, y hasta había que bajar el volumen de la t.v. para no molestarla cuando tomaba una siesta. En las mañanas esperaba que mi madre se despertara para empezar a molestar y meterse a su cama para que le engría. Si mi papá estaba allí, Lorena se enojaba y lo atacaba para que se fuera. No le gustaba que Luther narrara las noticias en la radio y le gustaba la música de Wallflowers.
Sin ser santo de su devoción, al menos me hacía caso cuando trataba de llevármela a algún lugar después de que nadie lo lograra. En fin, hay muchas cosas, muchos detalles que no sé de ella, ya que no era mi mascota, sino de mi madre, supongo que ella tendría anécdotas interesantes que contar, pero bueh… Como no podíamos permitir que se desperdiciara el animalito, mi madre preparó una rica Lorena a la orange que fue muy bien recibida por todos (todos menos yo. Estoy en otra etapa de vegetarianismo absurdo)
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