Es de esperarse que pongan toda la carne en el asador. De seguir con las mentiras, informaciones tendenciosas, y manipulación de la información, seguramente podrán engañar a más de un ciudadano de buena fe que cree que los medios defienden la libertad, cuando en realidad están defendiendo los intereses políticos y económicos, que entre otras cosas, les permitió por muchos años adquirir materia prima sin pagar impuestos.
El Comercio y El Universo le han estado dando palo a un informe de la UNESCO que supuestamente alerta por la censura. Lo que aún no dicen es que ese informe es sobre un
documento del 9 de noviembre, antes de que la Comisión de Comunicación redactara el informe final del proyecto de ley de comunicación, y en el que se incorporó aproximadamente el 80% de las observaciones.Esa campaña de malinformación sin duda ha llevado a la confusión a la ciudadanía, incluso a asambleístas de la Revolución Ciudadana, que aún quieren asumir que las bestias salvajes publican la verdad. Dicen que la UNESCO sorprendió al oficialismo, cuando los sorprendedores fueron los redactores de diario El Comercio. Mucha gente indignada ha manifestado en blogs, foros y otros espacios su oposición a la nueva ley. Pero no se dan cuenta de que su postura está basada en las falacias de las bestias salvajes.
Recién ayer la Asambleísta Betty Carrillo pudo aprovechar el informe a la nación de la presidencia para aclarar las cosas. Carrillo aclaró el tema de la manipulación de las fechas, y se remitió a un nuevo informe de la UNESCO en el que prácticamente dicen lo contrario.
En vez de cuestionar una supuesta concentración de poderes, la UNESCO dice:
“Es destacable que tenga autonomía financiera y administrativa, y se le permita la participación ciudadana junto con la creación de un órgano consultivo de amplia participación (…) “Felicitamos que se hayan incorporado los medios de comunicación comunitarios”.
en vez de decir que se violan derechos fundamentales, y reconociendo el uso mercantilista de la información por parte de las bestias salvajes, la UNESCO dice:
“Destacamos el enfoque de los derechos humanos y no mercantilistas de la información y comunicación, y de la mención expresa en reconocimiento a los tratados internacionales en la materia, como entorno regulatorio de referencia”.
En cuanto al registro de medios, en vez de cuestionarlo, la UNESCO dice:
“su existencia no solo es buena, sino que es una obligación de transparencia y rendición de cuentas; también es un buen instrumento para prevenir la concentración”.
con razón se oponen a tener ley. Actualmente tienen impunidad para casi cualquier cosa. Un reportero de prensa rosa puede humillar públicamente a cualquier ciudadano que tenga una deuda, y lo único que le queda es pagar para que no lo hagan quedar mal a nivel nacional. Un periódico puede publicar fotos retocadas de una persona que fue asesinada o tuvo un accidente, y su familia, además del dolor de la pérdida, tiene que lidiar con el morbo de los lectores.
Un periódico puede mentir sobre la razón por la que se dio visto bueno a trabajadores que paralizaron servicios públicos, y un articulista amargado puede decir que Ricardo Patiño les dió un curso para que paralicen los servicios públicos, y que los eléctricos sólo aplicaron lo aprendido. El mismo articulista puede acusar de matón al presidente del CFN, de delincuentes a ex pandilleros, y de reclutarlos con dinero público a kleber loor. .. y creen que pueden mentir con total impunidad.
Un reportero puede publicar en primera plana que Correa anunció la desdolarización. Otro puede decir que ya están en aduana los contenedores de una nueva moneda (si la gente no fue en bandada a sacar sus dolaritos de los bancos, es porque pocos le creen realmente a esos mentirosos). El dueño de otro periódico puede atropellar a una niña, negarse a que le hagan la prueba de alcoholemia, acusar a la mamá de la niña por no cuidarla, y hasta decir que él no atropelló a nadie, sino que su carro fue golpeado.
pueden anunciar que el gobierno pagará grupos de matones y espías que atormenten a los ciudadanos. Y callar si el que usa dinero público para sus comités es el alcalde de Guayaquil.
Los banqueros pueden usar sus medios de comunicación para hacer una verdadera guerra, que al final genere tal desconfianza que muchos incautos terminan haciendo fila para sacar sus ahorros, situación cuyo desenlace es el congelamiento bancario, y la emigración de millones de ecuatorianos.
Pueden amordazar a sus empleados, o decir que Estados Unidos tiene presidente de facto...
¿es eso lo que defienden los ciudadanos que dicen oponerse a la ley de comunicación, y que están a favor de la libertad de expresión?
¿no tienen inconveniente de que mañana los entreviste el cuy por una supuesta deuda? ¿o a salir en la extra con el rostro desfigurado luego de un accidente mortal? ¿o que un periódico mentiroso diga que tienen orden de prisión por actos de corrupción?
Urge una ley de comunicación que le pare el carro a las empresas que se dedican a hacer prensa. Sólo así, gente como Raúl Domínguez, que no conoce la realidad local, dejará de ser engañada por lo que dicen los periódicos.
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